Guareña es un municipio situado al norte de la provincia de Badajoz, que forma parte de los 388 municipios de la Comunidad Autónoma de Extremadura. Este se integra en la comarca de las Vegas Altas del Guadiana, y cuenta con que algunos de sus servicios están mancomunados en la Mancomunidad Integral de Municipios Guadiana.
Su término municipal abarca una extensión de 283,3 km2 y con una altitud sobre el nivel del mar, aproximada, de 285 metros, dentro de este, se ubica la Entidad Local de Torrefresneda y el asentamiento o pedanía de Las Gamitas. Con una posición estratégica, se sitúa relativamente cerca de algunas de las ciudades más importantes de la región, a 90 km de distancia de Badajoz, a 24,8 km de la capital autonómica, Mérida; y a 25 km de Don Benito. Los límites geográficos que presenta la localidad, corresponden con Santa Amalia, al norte; Don Benito, al este; Oliva de Mérida, al sur; y, Valverde de Mérida al oeste.
Con un relieve poco accidentado, en su enclave geográfico predominan las zonas llanas, con materiales del Terciario – Cuaternario, materiales lito – estratigráficos, y algunas ondulaciones en el terreno. Otro aspecto importante dentro de este campo, es la red hidrográfica. El Río Guadiana discurre al norte del término municipal, con numerosos afluentes, arroyos, regatos o “pequeños ríos” del Guadiana, como es el caso del Río Guadámez y el Río Búrdalo.
En el territorio de Guareña, como lugar de asentamiento humano es muy antiguo, existen vestigios que prueban una ascendencia prehistórica y romana. El origen de la población según el historiador Juan García- Murga es difícil centrarlo en fecha fija, y tenemos que basarnos en la información de los cronistas de la época. Autores como Mariana, Madoz, Cuadrado y Dozy le conceden un origen muy remoto, siendo conocida en tiempo de los romanos.
La población estuvo en poder de los musulmanes durante muchos años, apareciendo en la historia con su nombre actual en un privilegio concedido a Valdetorres por Alfonso X “El Sabio”, cuyas ventajas se hacían extensivas a Medellín y Guareña.
En la crónica de Alfonso XI aparece también incluida en el “Catálogo de pueblos” que ayudarán a dicho monarca en dos de sus grandes empresas: la batalla del Salado (1340) y el sitio y toma de Algeciras (1344).
La ciudad mereció en atención a sus méritos algunos privilegios destacando entre ellos el uso en sus armas de la “Cruz floreteada” del Salado y el título de “leal”, reconocido posteriormente por los Reyes Católicos que la declararon exenta de la Orden de Santiago, a la que pertenecía y le dieron Fuero Real en 1498.
Extraña el hecho de que Guareña y toda su comarca no pertenecieran a la Orden de Alcántara, muy poderosa en Extremadura, ello es debido a que por disposición del Rey Fernando III “EI Santo”, Trujillo, Medellín y Guareña permanecieran siempre al lado de la corona.
Desde el S. XVI hasta prácticamente la actualidad poco se conoce de la historia del municipio. Cabe destacar el hecho de que en los últimos años de la 2ª República, las rencillas y los enfrentamientos políticos fueran constantes, dando lugar ya en la Guerra Civil (1936-39) a matanzas indiscriminadas y ajustes de cuentas tanto por un bando como por otro. Guareña fue definitivamente tomada por el ejército franquista el 30 de Septiembre de 1936. Desde entonces hasta nuestros días, la vida de este municipio prácticamente ha seguido el mismo curso que la de España en general.
En cuanto a su población, según datos oficiales del INE (Instituto Nacional de Estadística) en el año 2020, la localidad contaba con un total de 6888 habitantes, de los cuales 3457 son hombres y 3431 mujeres.
Cuna de importantes poetas como Luis Chamizo Trigueros autor de “El Miajón de los Castúos” y escritores como Eugenio Frutos Cortés, presenta elementos de gran valor cultural y patrimonial, como la Iglesia de Santa María del siglo XVII y el actual reconocimiento de BIC (Bien de Interés Cultural) del Yacimiento y conjunto arqueológico de “Casas del Turuñuelo”.








