Son muchos las construcciones históricas recuperadas del olvido , tradiciones, leyendas, música, juegos populares,... todo vale si el fin perseguido es identificarnos con nuestras raíces.
Tras el descubrimiento o en algunos casos redescubrimiento de este patrimonio histórico cultural hemos conocido que la historia local se remonta a tiempos del Eneolítico, y que son muchas las culturas que pasaron por estas tierras y la eligieron como morada.
Las primeras civilizaciones nos han dejado restos en los alrededores como el dolmen de Sierra Gorda (Eneolitico), con una antigüedad de unos 1.500 a. C. Existen indicios de asentamientos, en lo que ahora es el caso urbano, eligiendo este para asentarse tal vez buscando un abundante manantial de agua, hoy convertido en fuente pública. Así lo demuestra la Necrópolis visigoda encontrada junto a la "Fuente", y la villa romana dentro del recinto de la población.
A parte dentro del término municipal, existen ruinas de fortines prerromanos construidos para defensa del territorio y alojamientos de los destacamentos de las legiones imperiales, que más tarde fueron reutilizados por romanos y árabes. Así tenemos el fortín de Tachón de la Dehesilla, la Torrecilla y el Castillejo. Este último se haya situado en una elevación natural junto al río, en la confluencia de dos vías romanas, una de las cuales unía Corduba con Emérita Augusta.
Se sabe además que el Valle como pequeño núcleo de habitantes fue arrebatado a los árabes, en el año 1234, por el Maestre de la orden de Alcántara D. Pedro Yáñez y fue integrado al priorato de Zalamea, por lo que paso a llamarse Valle de Zalamea. Hasta 1724 el Valle pertenecía a la encomienda de Zalamea, siendo después enajenada como Villa de señorío a D. Rodrigo Morillo de Velarde, a quien perteneció hasta 1811.
Existen también datos de que la actual Iglesia Parroquial se construyó sobre un fortín posiblemente prerromano, en el siglo XVI. Esta construcción es uno de las edificios más representativas de nuestro patrimonio, catalogado como protegido en primer grado por las normas urbanísticas municipales y protegido como bien inventariado por la Consejería de Cultura .
Durante la Guerra de la Independencia, al ser un lugar apartado y situado estratégicamente se utilizó como refugio, previo a la batalla de Medellín, recogiendo después a las derrotadas tropas españolas. En este periodo nació en Valle de la Serena El Ilustre D. Juan Fco. Manuel María de la Salud Donoso Cortés y Fernández Canedo, el "Sabio Extremeño.", I Marqués de Valdegamas y Vizconde de Valle de la Serena.


